(1848-1930,
estadounidense)
Traducido del inglés
y compilado por J. Rodros. Blavatsky Editorial, México, 2005.
Laura
Carter Holloway fue una autora y periodista americana. Escribió varios
libros incluyendo Ladies of
the White House [Damas de la Casa Blanca ], (1870) del cual se vendieron más de
100,000 ejemplares. La
Sra. Holloway fue editora asociada (1870-1874) del Brooklyn Daily Eagle.
Conoció
a William Judge en Nueva York en enero de 1883 (Zirkoff, CW, Cronología) y éste vio en ella muchas posibilidades como
una futura trabajadora en el Movimiento. Laura Holloway tenía habilidades psíquicas. En
la primavera de 1884 recibió una carta de HPB, que la motivó a ir a
entrevistarse con ella, cuando se encontraba de visita en Europa.
La señora
Holloway viaja a París para ver a Blavatsky
Su
viaje lo realizó unas semanas después de que William Judge iniciara el suyo a la India vía Europa. Judge
llegó a Paris el 25 de Marzo de 1884. Durante el mes de mayo, la Sra. Holloway llegó
directamente a Londres en busca de Blavatsky, pero se enteró de que ella estaba
en Paris, a donde había llegado desde Niza, el 28 de marzo a las 11 de la
noche.
Blavatsky vivía en un
apartamento en Rue Nôtre Dame des Champs. La mañana siguiente
a su llegada a París, Laura Holloway, acompañada por el Sr. Judge fue
presentada con HPB. El departamento de
HPB estaba lleno de visitantes especialmente franceses y alemanes.
Nôtre Dame des Champs, París
Laura
Holloway asistió a varias de esas reuniones, y con respecto a Blavatsky, ella
dice que:
“Sus
capacidades lingüísticas eran notables, incluso para una rusa. Daba gusto
escucharla hablar en francés—y los jóvenes parisinos que llenaban su sala los
domingos en la tarde y en la noche— frecuentemente se les oía hacer notar su buen
acento.
Me
gustaba estar presente en esas reuniones, ya que ella hablaba muy bien, y daba
mucha instrucción a los jóvenes que eran miembros de la rama de París de la
Sociedad Teosófica.”
(blavatskyarchives.com/holloway4.htm)
Laura
Holloway en Londres en casa de los Sinnett
Hacia
finales de mayo, 1884, Laura Holloway dejó a Blavatsky en París y se fue a
Londres, viviendo primero en casa de las Arundale y posteriormente en la de los
Sinnett.
El
29 de junio 1884, Blavatsky fue a Londres residiendo también en la casa de las
Arundale, 77 Elgin Crescent, Notting Hill; y entonces Laura Holloway regresó a
vivir con ella, aunque continuó haciendo visitas a la casa de los Sinnett. Sin
embargo, antes de continuar este relato, es necesario explicar algunos hechos
relacionados con la visita de Laura Holloway a Londres.
El
Mahatma K.H. había visto en ella posibilidades de que con el debido
entrenamiento ella pudiese convertirse en un eslabón más entre los Mahatmas y
el mundo occidental, de ahí la necesidad de que estuviese próxima a HPB.
Por
otro lado, el Sr. Sinnett, prácticamente desde el inicio de su comunicación
epistolar con los Mahatmas, siempre quiso relacionarse directamente con ellos
sin la intermediación de HPB o de algún otro chela de los Maestros.
Al
volver a Inglaterra en abril, 1883, y ya plenamente establecido en Londres,
estando lejos de HPB, intentó por todos los medios, establecer contacto directo
con los Maestros, utilizando médiums y cayendo en prácticas y teorías
Espiritualistas, contrarias a lo que los Mahatmas le habían enseñado y
advertido de no hacer; por sus peligros y engaños.
Sinnett
intenta usar a la señora Holloway como médium
Cuando
la Sra. Holloway
llegó a Londres, pronto visitó a los Sinnett, los cuales le prodigaron toda
clase de atenciones invitándola a quedarse en su casa por algún tiempo. La Sra. Patience Sinnett, esposa del Sr. Sinnett era una magnífica anfitriona. Viendo el
Sr. Sinnett que Laura Holloway tenía ciertas habilidades psíquicas, intentó
usarla como médium para entrar en contacto con K.H., independientemente de HPB,
sin embargo en vez de hablar con K.H., lo único que obtuvo fue una comunicación
con un Bhûta, un Elementario.
Sinnett se comunica con un Bhûta
A
este respecto el Maestro K.H. Le dice:
“Nunca
te he obligado a hacer algo a través de la Sra. H. [Holloway]; nunca me he comunicado
contigo o con ningún otro a través de ella.”
(CM 62,
p.355)
Sin
embargo, el Sr. Sinnett pensó que ésta y otras cartas que recibió de K.H.
durante esa época eran falsas e inventadas por HPB por envidia hacia él, tal
como él lo dice en su obra póstuma The
Early Days of Theosophy in Europe (p.58-62).
En
una carta escrita por el Maestro K.H. a Francesca Arundale, [Cartas Mahatma Publicadas y no
Publicadas para y acerca de la
Sra. Laura C. Holloway, No.9] en donde dice que:
“No
es la Señora H.
[Holloway], la que obligó al Mahatma K.H. a decirle al Sr. Sinnett que las
cosas que se le habían dado a través de ella eran falsas debido a su origen, ya
que ella sintiendo esto intuitivamente, se lo advirtió muchas veces.
La
causa de todo el problema proviene de unas cuantas cosas que se le dijeron
correctamente, y como resultado de esto, el error del Sr. Sinnett de creer
firmemente que había estado en comunicación directa con el Mahatma K.H. y sus
Chelas a través de la
Sra. Holloway. Esto,
unido a la influencia fatal que está operando, una que incluso durante las
últimas horas, y desde que tuvo lugar la reconciliación, ha vuelto una vez más
a alcanzar al Sr. Sinnett, y que fue la verdadera causa del veneno que se ha
esparcido.
Leal
y devoto como él siempre ha sido, aún lo amenaza y lo envuelve como una nube
negra, que constantemente se está aproximando a la Sra. Holloway , al
igual que a otros miembros de la
Logia de Londres. Que todos queden advertidos.
Ella
[la Sra. Holloway ]
ha estado jugando con fuego recientemente actuando como médium para un bhûta en
su casa [la del Sr. Sinnett]. Adviértele del peligro que ella corre”, el cual
no es menor para otros – y prevén al Sr. Sinnett.
.
. .
Confírmale
a Mohini lo que por impresión directa debe haber aprendido de mi – el mal
magnetismo que él está constantemente recogiendo – aunque lo arroje tan
rápidamente – es demasiado – él está en lo correcto en querer detener a la Sra. H. [Holloway] para
que no se inmiscuya en este asunto.
MOHINI TIENE RAZÓN Y
SINNETT ESTÁ EQUIVOCADO.
Ordénale
[a Mohini] que también restablezca las sesiones de trabajo para escribir el
libro [El Hombre:
Fragmentos de una Historia Olvidada] aquí, en vez de con el Sr.
Sinnett. . .”
(Carta
del Maestro K.H. a H.P.B. recibida en Londres a mediados de julio 1884, ver Published and Unpublished. . . etc.
blavatskyarchives)
K.H. acerca
de Laura Holloway
“Hemos
logrado nuestro objeto respecto a L.C.H. [Laura Carter Holloway]. Ella ha
mejorado mucho, y de aquí en adelante toda su vida se verá beneficiada por el
entrenamiento por el que ha pasado. El haberse detenido contigo hubiera sido
para ella una pérdida psíquica irreparable. . . su mente se estaba trastornando
rápidamente y haciéndose inútil como un instrumento oculto. Se estaban
apoderando de ella falsos maestros y la estaban extraviando falsas
revelaciones, al igual que a los que la consultaban.
Tu
casa, mi querido amigo, tiene una colonia de Elementarios que moran en ella, y
para una sensitiva como ella, era una atmósfera tan peligrosa para existir como
lo sería un cementerio para alguien sujeto a influencias físicas mórbidas.
Deberías ser más que ordinariamente cuidadoso cuando regreses, de no alentar la
sensibilidad en tu casa, y de no admitir visitas de sensitivos mediúmnicos salvo
las que no puedas evitar.
Sería
bueno también que quemaras fuegos de madera en los cuartos de vez en cuando y
que llevaras por toda la casa fumigadores en recipientes abiertos (braceros)
con madera ardiendo. También podrías pedirle a Dâmodar que te envíe algunos
manojos de inciensos para que los uses con este propósito.
Todo
esto te puede ayudar, pero el mejor medio para eliminar invitados indeseables
de esta clase, es que vivas puramente en acto y pensamiento. Los talismanes que
se te habían dado, también te ayudarán poderosamente si mantienes inquebrantable tu
confianza en ellos y en nosotros. . . (¿?)”
(CM
55, p.323)
“La Sra. Holloway es una
clarividente excelente aunque completamente subdesarrollada. Si no te hubieses
entrometido con ella, imprudentemente, y hubieses seguido el consejo de la
vieja dama [HPB] y el de Mohini, en verdad, para este tiempo habría podido
hablarte a través de ella – y tal era
nuestra intención. Es de nuevo tu culpa, mi buen amigo.
Orgullosamente te ha tomado el privilegio de ejercer tu propio juicio
incontrolado, en materias ocultas—que crees que puedes desafiar y con las que
crees que puedes jugar con impunidad—se te han volteado y te han dejado mal
herido.”
(CM
62, p.355-356)
“Nosotros
habíamos encontrado a la Sra.
H. [Holloway] en América, fijamos en ella la idea de que se
preparara para escribir el libro que ha producido con la ayuda de Mohini. Si
ella hubiese consentido detenerse en París, como se le pidió, unos cuantos días
más y venir a Inglaterra con HPB, se hubieran evitado las últimas
complicaciones.
El
efecto de que ella haya ido a tu casa te ha sido descrito por ella antes; y al
resentir lo que Mohini y HPB te dijeron, y la Sra. H., tu simplemente
has estado resintiendo nuestros deseos personales.
Incluso ahora resentirás mis palabras cuando te digo
que—inconscientemente, estoy de acuerdo—has estado estorbándome en su
desarrollo. Y sin embargo tu hubieses sido el primero en aprovecharte de esto.”
(CM
66, p.369)
El Hombre:
Fragmentos de una Historia Olvidada
Durante
su estancia en Londres en el verano de 1884, Laura Holloway escribió junto con
Mohini el libro: El Hombre:
Fragmentos de una Historia Olvidada, y a este respecto son muy
interesantes los recuerdos que sobre este período memorable dejó escritos
Francesca Arundale:
“Durante
el tiempo en que HPB estuvo con nostras, una dama americana la Sra. L. C. Holloway vino a
verla, y HPB encontró que la
Sra. Holloway tenía ciertas cualidades psíquicas que le
permitirían ser usadas para el trabajo de los Maestros; y aunque esas mismas
cualidades psíquicas traían consigo el peligro de errores, HPB determinó
probarla. Se les dijo a Mohini Chatterji y a la Sra. Holloway que
miraran hacia atrás dentro del pasado remoto y que esbozaran la historia de las
épocas lejanas.
Ellos
hicieron esto, y en el pequeño cuarto de arriba en Elgin Crescent los dos
nuevos amigos, se dieron a la tarea de escribir día tras día: El Hombre: Fragmentos de una Historia
Olvidada. Yo estaba constantemente con ellos, y me pareció de lo
más fascinante penetrar dentro de las sombras del pasado. Es posible que haya algunos errores en el libro, yo
sé que de hecho los hay. . . pero los Maestros ayudaron, y Ellos aportaron
varias páginas de manuscrito, y Ellos hicieron correcciones de vez en cuando.”
(My Guest – H.P.
Blavatsky, por
Francesca Arundale, p.42-43)
Ver también a este respecto: The Letters of H.P. Blavatsky to A.
P. Sinnett, T.U.P., pp. 93, 254 et. seq.
Holloway en
Elberfeld
El
16 de agosto de 1884, HPB junto con Laura Holloway, Mohini, Bertram Keightley,
Mary Anne Arundale, Francesca Arundale, y el pequeño George Arundale (que había
sido adoptado) dejaron Londres con rumbo a Elberfeld, Alemania, para residir en
la mansión del Cónsul Gustav Gebhard y de su esposa Mary.
El
2 de octubre los Sinnett llegaron de visita con los Gebhards a Elberfeld. El 4,
o 5 de octubre HPB junto con Laura Holloway y Rudolf Gebhard partieron de
Elberfeld rumbo a Londres.
Laura
Holloway de vuelta a los Estados Unidos
“Laura
Holloway volvió a los Estados Unidos, en donde fue Presidente de la famosa Seidl Musical Society .
Durante esa época, intercambió una gran cantidad de cartas con el coronel
Olcott, y fue su representante en materias “ocultas” en Brooklyn.
(Ver Carta de HPB: Carta Mahatma,
N°139, p.476)
Después
de algunos años, renunció a la Sociedad Teosófica (Adyar), aunque mantuvo una
relación amistosa con algunos antiguos miembros. Ella fue muy buena amiga de la
hermana del coronel Olcott, la
Sra. Mitchell ”.
(Sven
Eek, Damodar…, p.628)
También
mantuvo un contacto amistoso con Alice Leighton Cleather con la que planeó
escribir un libro que nunca se publicó, que llevaría por título: Helena Petrovna Blavatsky: Personal
Recollections by Old Friends, [Helena Petrovna Blavatsky: Recuerdos
Personales de Viejas Amigas].
1906
Conversación
de Olcott y L. Holloway en Nueva York:
“Fui injusto
con Judge.”
Laura
Holloway tuvo una conversación con el coronel Olcott en la ciudad de Nueva York
en 1906, durante su visita a los Estados Unidos el año anterior a su muerte.
“Olcott
le escribió a la Sra.
Holloway desde Boston, pidiéndole que lo visitara cuando él
llegara a Nueva York a donde iba a dar una conferencia en el Carnegie Hall.
Ella así lo hizo, y la conversación giró en torno al trabajo del Movimiento
Teosófico. Muy pronto, la
Sra. Holloway se dio cuenta de que Olcott estaba solo,
nostálgico, y que le hacía mucha falta su antigua asociación con HPB.
Él
habló de su ‘querida vieja colega' y se daba cuenta de la magnitud de su
pérdida, ‘en el hilo de los acontecimientos de la Sociedad Teosófica
desde su muerte'. Además, aunque Olcott era aún el ‘Presidente Fundador', decía
que otros trabajadores más jóvenes, estaban en control de los asuntos de la
Sociedad.
La
Sra. Holloway le recordó que había un tercer colaborador que había estado con
él y con HPB en el principio, y con el que Olcott fue posteriormente hostil.
Olcott sabía que ella hablaba de Judge, y animado por su visitante, le tomó la
mano y dijo, ‘en un tono sumiso y de lo más impresionante’:
“Todos
aprendemos mucho con el tiempo, y he sobrevivido mucho y aprendido más,
particularmente con respecto a Judge. . . Yo sé ahora, y te confortará el
escucharlo, que fui injusto con Judge, no a propósito o con malicia; sin
embargo lo hice y lo lamento'. Cuando la Sra. Holloway
expresó su alegría ante este reconocimiento, Olcott contestó: ‘A nadie más le
he dicho tanto como a ti, y como estás tan complacida, estoy contento de que
pude decírtelo a ti.”
El
reporte de esta entrevista fue publicado por Harold W. Percival en la revista
Teosófica The Word del
mes de octubre 1915, como parte de una serie de reminiscencias respecto a las
principales figuras del Movimiento Teosófico.
En
una Carta Adicional al Editor, la Sra. Holloway explicó que “ella no buscó una
confesión de Olcott, ni tampoco quería ‘ninguna confidencia de él que no fuese
voluntaria”.
La
gran amistad que ella tenía con Judge, y que ella pensó que era bien sabida por
Olcott, lo llevó a revelar los sentimientos de su corazón al final de su vida.
Es de gran interés el talante de Olcott durante la conversación que ella nos
relata:
“.
. . después de este largo lapso de tiempo, y con un sentido de justicia tanto para
él como para el Sr. Judge siento que estoy haciendo lo correcto al consentir
que se publique. No puedo reproducir su manera seria y contrita, ni tampoco
puedo transmitir la atmósfera de paz y armonía que caracterizó la ocasión. . .
cuando le recordé, como lo hice, qué tan larga e inalteradamente ella [HPB]
había amado al Sr. Judge, él se sentó como uno que escucha a alguien que habla
invisiblemente. Pero estas cosas no pueden ser pintadas en este relato de las
pocas palabras que dijo para vindicar al Sr. Judge.”
(The
Theosophical Movement,
1875-1925 The Cunningham Press, p.299-300)
Laura
Holloway en conexión con la Sociedad Teosófica de Nueva York
Durante
sus últimos años, Laura Holloway estuvo conectada con el grupo que en 1898 se
formó bajo el nombre de Sociedad Teosófica de Nueva York, la cual tenía la
revista Teosófica The Word,
editada por Harold C. Percival. Entre los miembros destacados de
este grupo cabría mencionar al Dr. J.H. Salisbury, que había conocido bien al
Sr. Judge, Donal Nicholson editor en Jefe del New York Tribune, otro viejo amigo de HPB y
Judge, y el Dr. Alexander Wilder, el platónico erudito que estuvo conectado con
HPB cuando ella escribió Isis
Develada en Nueva York.
(Ibid.
p.302)
Obras
·
Man: Fragments of
Forgotten History, By Two Chelas in the Theosophical Society. (L.C.
Holloway & Mohini Chatterji) Londres: Reeves and Turner, 1885; 2a., ed.
1887; 3a ed. 1893. Kessinger, Kila, MT, 2004.
·
El Hombre: Fragmentos de una Historia
Olvidada, por dos Chelas de la Sociedad Teosófica.
(L.C.H. y M.CH), traducido al castellano por D.C.M., Barcelona: Biblioteca
Orientalista, 1902. México: Blavatsky Editorial, A.C. incorporando las
correcciones de K.H. y H.P.B., y Anexo con cartas de H.P.B. al respecto.
·
Five Years of
Theosophy [Cinco Años de Teosofía]. Compilación de una
selección de artículos de los primeros cinco números de la revista The Theosophist, en
colaboración con Mohini M. Chatterji, Londres: Reeves and Turner, 1885.